PEDÍ UN DESEO: NO PERDAMOS EL TREN

El Bicentenario no es una estación....

¿por eso no hay trenes que nos lleven?

Pedí un deseo from Ferrowhite on Vimeo.

Pero, ¿qué pasa si vos pedís ese deseo? ¿y si ella lo pide? ¿y si él lo pide? ¿si cada uno de los chicos del taller lo pide? ¿si en cada casa de White, del Bule, se pide ese deseo?¿y si todos lo pedimos?

No perdamos los sueños, pidamos deseos: no perdamos el tren...

OTRA VEZ EN MOVIMIENTO

Antes de que dentro del taller se ponga demasiado frío, comenzamos otra vez.

De a poco, fuimos llamando a las chicas, las chicas fueron invitando a otros, otros se acercaron por su cuenta y, cuando nos dimos cuenta, la mesa del taller nos quedó chica.

Cada semana, viene Valentín que, con nueve añitos, es imparable.

Cada semana, aparecen las chicas de la 21 caminando por la calle del Boulevard, que ahora están arreglando. Vienen las de siempre y amigas nuevas.

Cada semana, vienen la chicas y chicos de la banda "Rodado 22".

Cada semana, vienen chicas jóvenes que trabajan en White.

Cada miércoles, vienen varios chicos del Noroeste a sumarse al grupo.

Ya es el segundo año del Taller en el "Ferro" (como le dicen Mari y Maira). Esta vez, centrándonos en el lugar donde estamos, en White, empezamos por marcar y ubicar los lugares conocidos y los recorridos diarios que cada uno hace.

Además, dándo inicio al Proyecto Nuestro Lugar, pusimos en marcha la producción de "La papelería": anotadores, libretas para el taller, hechos con papel reciclado, monocopias de rechazo, técnicas de grabado.

Ahora, además de remeras, vamos a escuchar apuntes, libretas, chicos y chicas, jóvenes de White y del Bule... ¡¡Otra vez está en marcha el taller!! Y este año, ¡¡el tren llegará lejos!!

MÚSICA INDUSTRIAL

Rumores de hojas plásticas.
Quejidos de verdes, azules y transparentes contra el tejido perimetral.
Las plantas se enriedan contra lo que las limita, o las diferencia de las otras botellas que van a la deriva entre neumáticos y gaviotas..

De este lado lo mismo que debajo flota mutado en algo bello, musical, que hace fri-fri con el viento que se cuela entre tanto procesos industriales, sonidos de máquinas, tolvas y cintas, enredaderas de polietileno de alta densidad.

Los elementos conviven, se adaptan. ¿La fertilidad del lugar o los materiales reutilizables? Cortinas forestales de elementos de desecho: son el sonido del futuro.

¡FESTICHOLA!

¡Cuántas cosas pasaron en el 2009!

Imposible numerar sin que alguna actividad quede fuera pero más difícil repasar todos los momentos que compartimos todos en el taller: frío y calor, por ahí algunas lluvias, y viento (y tierra) que se colaba por todos lados, mate re dulce, galletitas, torta de cumpleaños de Mariana, pastafrola de Jimena, torta de azúcar negra de Sil, peleas, chusmeríos, pequeños malentendidos, manchas de tinta en las camperas, historia de amor, bailes de regeton, abuelas, sorpresas, etc. etc. etc.

Entonces, ¿cómo no festejar, ponernos contentos, alegrarnos y celebrar? Así que mañana, desde las seis de la tarde, TODOS (los chicos, las familias, los vecinos que ayudaron, los grandes) nos encontramos en FERROWHITE.
Además se presenta el último trabajo que se hizo en el año con las chicas del taller. La "Vera Bolsa" podrá ser adquirida (o ganada).

¡Los esperamos!

YA LLOVIO

Entonces, como en todos los patios: las flores.


En la cercanía del mar, no alcanzó con el agua que, por puro efecto climático, se precipitó. Hicieron falta tijeras,cuters, manos, creatividad.
Pero tampoco fue suficiente. La inmensidad del lugar obliga a ser abundante.

Quién dice,quizás para festejar el verano, se nos primavera el parque....

Antes que el museo estuviera emplazado en el predio de la ex Usina Gral. San Martín, ellas ya estaban.
Antes que nosotros llegáramos, ellas ya estaban.
Antes que hiciéramos la visita con el taller, ellas conocían de otra manera el entorno.

Mauricio Kartun habla de las contracciones: de la suma de dos sale un tercero que no es igual a 1+1, no es la suma de las partes. Ocurre eso en pintura, en teatro, en poesía. Pero también en un taller, o, al menos, en el nuestro.

Las chicas son de acá. La mayoría nacieron y crecieron en las cercanías de este lugar: el conocimiento que tienen del espacio es el de la persona que lo habita. Mapa inexacto de usos y costumbres. Recorridos constantes y simétricos, con tangentes y salidas de emergencia (“si caminás sola, no podés pasar por la cerealera. Te gritan cosas.”).

Este es el espacio de su vida.

Nosotros (y solo en este sentido debemos marcar una diferencia, porque el “nosotros” implica también a “todos los que participamos, estamos, hacemos el taller”, dicho de otro modo, “todos”, “ellas y nosotros” ) estamos un poco de visita.
Con mirada de turista, percibimos todo aquello que nos resulta extraño y tratamos de buscar semejanzas con lo conocido.
Pero la mirada se acostumbra de a poco, vamos borrando aquellas cosas que no comprendemos, que nos empiezan a resultar familiares, que se diluyen en el paisaje del lugar. Entonces, solo queda ese híbrido entre la mirada de ser de afuera y ser un poco de acá, híbrido no fecundo si no existieran instancias de interacción con quienes realmente habitan el lugar.

El taller es ese lugar donde se conciben nuevas imágenes.
El taller es la posibilidad de esa contracción. De la creación de formas nuevas que aumentan el lente con el que se mira lo que hay alrededor pero volviéndolo comprensible, traduciéndolo en un lenguaje local. O al revés.
Los recorridos por afuera no son para que las chicas “vean” qué hay. Son introspecciones para unos y otros.
Introspecciones, al fin, de la mano del de afuera y de la mano de quien habita.

VEGETACIÓN MUTADA: SIN LLUVIA CRECE IGUAL.

La vegetación mutada es imaginaria pero de una genética posible: a pesar del clima árido, de la falta de lluvia, de las ráfagas huracanadas, la vegetación del taller está empezando a crecer.

Pronto, se verán las flores brillantes.
Pronto, se podrán sentarse sobre una planta plana, que los deja tomar mate sobre ella.


El taller va dando color a la Rambla: las vegetación mutada irá tomando el alambrado perimetral y el duro suelo de cemento.

¡A PREPARSE! Por suerte, ¡no a todo seca esta sequía!

YA LLEGO LA PRIMAVERA

"Colores claros", "hojas pequeñas". Esas fueron las características principales que nuestros vecinos de la Reserva "BAHIA BLANCA, BAHIA FALSA, BAHIA VERDE".
A partir de la charla con la Licenciada Victoria Massola, las chicas estuvieron trabajando en la posible vegetación de la Rambla y sus alrededores.

DE BOCA EN BOCA

Una foto: Mica, Pochi, Stefy, Mari y Sabrina con la segunda tanda de remeras para Huracán, detrás el castillo.

Esa foto es la que se salió publicada en la nota “Aprender a hablar desde el diseño y la vestimenta”, diario La Nueva Provincia, del domingo 23 de Agosto de 2009 (pág. 53).

¿Por qué una nota en el diario?

Durante las últimas semanas del receso escolar, causado por gripe A, el taller siguió funcionando sin mate y con alcohol en gel. Los padres encargados de las divisiones menores del club Huracán, se acercaron al taller para proponernos confeccionar las remeras que serían regaladas a los chicos del club durante el festival del día del niño (el pasado día 17 de Agosto).

Por primera vez, nos enfrentábamos a una actividad en serie, haciendo desde la tela y con un límite de tiempo. Desde un rollo de tela –roja-, salieron las 70 remeras con cangrejo y globito serigrafiado en el taller. Los moldes, el corte, la impresión y la presentación (¡con etiquetas del Taller de Serigrafía!) estuvo a cargo de las chicas. La costura, la hicieron las bolseras Rosa y Maruca (ver link entrada de bolseras en museotaller).

Pero, la actividad de las chicas no terminó ahí: ellas fueron a entregarlas y a filmar el evento, a sacar fotos y ver cómo les quedaban a los nenes. Así, como correspondía al pedido de las chicas, los medios hicieron eco de lo que estaba pasando en el taller y, no solo fueron ellos, sino que muchos vecinos del barrio, compañeros de la escuela e hinchas del club se enteraron lo que pasa por las tardes en el museo taller.

EVELYN PELUFO

La mamá de Mari dice que ella siempre quiere llevar a todos sus amigos y compañeros al taller y, por eso, invitó a Eve. Mientras esperaba que el resto termine de dibujar, nos contó como era su amiga:

"Eve es una chica re buena desde que nos conocimos en realidad apenas empeso la escuela y toco el timbre y nos empezamos a hablar y así fue.
Fui a la casa y despues ella fue a mi casa y asi sucesivamente nos sentamos juntas nos pasamos la tarea y un monton de cosas lindas.
FIN"