Mari y Maira invitaron a sus compañeros de grado.
Además de los de siempre hoy estuvieron Fernando y Nahuel (los primeros valientes), retomó Natacha, vino Johana, volvió Brenda, volvió Evelyn. Así que la mesa del taller, repleta de dibujos, quedó chica y hubo que buscar sillas dentro del museo.
Además, teníamos una sorpresa para las chicas del taller que les encantó: camperas abrigadas a las que van a imprimirles el dibujo que ellas quieran. Dibujos que ya empezamos trabajar en papel borrador para después pasarlo en papel vegetal para pronto poder revelar un shablon con lo que a ellas realmente les gusta: corazones, dibujos de Huracán, caricaturas de chicas y demás.
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